Un ratón particular.
-Qué dices carbonillas ¡si todos te queremos!
Yo se lo decía a mi ratón carbonillas.
-Por qué dices qué ninguno te queremos. Yo si te
quiero y mis padres también.
Mi ratón, al yo decirle todo eso, se emocionó y fuimos a comprarnos
palomitas. Mi ratón le iba diciendo a toda la gente que sí lo querían, y la
gente le respondía que sí porque era muy bonito y muy gracioso, sobre todo
cuando hablaba. Mi ratón ese día fue el más feliz del cine.
-¿A qué no sabéis quién es la misteriosa compañera
de mi ratón llamado carbonillas? Pues quién va a ser ¡su novia! Se llamada
Rosalinda y los dos fueron muy felices comiendo palomitas con sus 9 ratoncillos
y ratoncillas.
El 2º clasificado de la semana (28/03/12)
M. Jiménez Fajardo.